1 Corintios 10:23
"Todo me es lícito, mas no todo conviene: todo me es lícito, mas no todo edifica."
Todos los días tomamos decisiones, desde que nos levantamos hasta la hora de volver a dormir, mientras estemos en esta tierra no podemos evitar las decisiones y siempre hay algunas que son más importantes que otras.
Dios en su infinito amor, nos dio la oportunidad de que seamos nosotros los que tomamos las decisiones, que tomemos el control de nuestra vida y por eso es todo nos es permitido. No tenemos restricciones para elegir, sin embargo, hay decisiones que pueden hacernos daño o hacerle daño a las personas que amamos.
Hay cosas que elegimos y sus consecuencias se quedarán con nosotros toda la vida, es por eso que debemos de elegir sabiamente, elegir con prudencia.
Todo es permitido, pero no todo es correcto. Aprendamos a decidir todos los días con prudencia y a como Dios le agrada.